Soneto.-
Habiendo recibido el mismo trato
que muchos animales de la calle,
bastante fuerte ha sido tu detalle
que sin razón me llamas mentecato.
Y no quiero pasarme todo el rato
pensando, si pretendes que me calle,
o quizás que en la arena me desmaye
hasta que justifiques tu alegato.
Cuando miro hacia atrás y me arrepiento
de las abrazos de verdad perdidos,
no es más que una ilusión distorsionada
de los problemas que a menudo enfrento,
sabiendo que mis pobres apellidos
nunca aquí se han batido con la espada.
|