SONETO.-
Cuando a solas divago por el mundo,
voy como por el agua van los peces
siempre a mis anchas y además con creces,
con el convencimiento más rotundo.
Igual me guste andar de vagabundo
bien oculto detrás de estupideces,
donde quizás locuras y sandeces
algún día me metan bien profundo.
Pues yendo por ahí como un cualquiera
a medida me compro los zapatos,
según capricho en el lugar que quiero,
de modo que observando por la acera
independiente voy como los gatos
que por andar me queda aún sendero.-
|