ODIO SER UN PERJURO DISFRAZADO
Odio ser un perjuro disfrazado
con careta de falsas convicciones,
tan reprimido a base de sermones
que sentirme me siento desgraciado.
Mucho dudo que sea condenado
y enterrado carente de atenciones,
si igual por no creer en religiones
en el hoyo quedara abandonado.
Así al dejar mi testamento escrito
no dejaré al devoto descontento
marchándome al cajón con mi mortaja,
sin que a nadie le exija un monolito
que al tiempo se relegue cara al viento
al ver que con mis versos no hacen caja.-
|