SENTIRSE BIEN AMADO
Cuesta sudor y lágrimas mi niño
el trajín de sentirse bien amado,
sin que se sepa ver afortunado
y gozar del amor y del cariño.
Pero sin valorar por qué te riño
al estimarte siempre sojuzgado,
me comprometo a caminar callado
por no privarte nunca de un aliño.
Si algún día pudieras permitirte
que la fe lo negado te devuelva,
cómo obviar un “te quiero nunca puedo”,
si poco costaría decidirte
a vivir de por vida en esa selva
expiando tan a gusto aqueste enredo.
|