PRESAS DE NUESTROS PENSAMIENTOS
Si a diario tú no cuidas de tus dientes
afrontando peligros como un loco,
menos lo harán tus sádicos parientes
a quienes interesas más bien poco.
No será que comiéndonos el coco
al parentesco damos importancia,
y tratando de obviar cualquier sofoco
a apegos recurrimos de la infancia.
Quizás seamos algo masoquistas
si hurgando en las heridas nos pasamos
parte de nuestras vidas tan contentos,
tal que siendo en extremo nihilistas
dentro del mismo barco todos vamos
presas de nuestros propios pensamientos.-
|