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SONETO
QUE NADIE SE LLAME A ENGAO
Entre chorizos anda siempre el juego,
que nadie ms se llame aqu a engaos
cuando entre trampas srdidas y apaos
de orgullo se rebosan todo el ego.
Ahora todos quieren dar el pego
mientras al topo miran como extraos,
pretendiendo escalar an escaos
donde tal vez no les alcance el fuego.
La corrupcin a todos les salpica,
aunque la ley a muchos hoy proteja
porque habitar habitan las alturas,
asunto por el cual se les critica
por ms que or no escuchen ni la queja
de un pueblo que les grita CARA DURAS.
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