SONETO
ESPERANZA
A vivir la esperanza al hombre ayuda
pero no le resuelve sus marrones,
si pisndole a diario los talones
a socorrerle igual ni dios acude.
Pues cuando lgrimas y sangre suda
para que se valoren hoy sus dones,
si no logra escapar de los bribones
hoy la realidad luce bien cruda.
Quien sabe si firmando la sentencia
de muerte, ya sin fe nos levantamos
y como los sonmbulos vivimos,
suponiendo que toda referencia
si a pecho el ideal no lo tomamos,
es que sin salvacin igual nacimos.
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