SONETO
Me gustaría ser aventurero
aunque en mi bienestar tal vez me instalo ,
siempre sonriendo sin hacer de malo
para abrazar mi sino verdadero.
Si ese amor lo sintiera tan sincero
protegerlo sería mi regalo,
porque ya evitaría el varapalo
si entre medias hubiera un avispero.
Porque admitiendo líos evidentes
me perderé quizás la fantasía
de quien logre esconderme una sorpresa,
cuando mis ojos no han de estar ausentes
nunca de demostrar con alegría
el cumplir con orgullo su promesa.
|