SIN MÁS SALIDAS
Víctima del dolor y la miseria,
a pesar de las lágrimas bebidas
la gente sigue yéndose de feria,
al no escuchar que existan más salidas.
Igual nacemos para ser dichosos
pero de frente vienen los marrones,
que entre obstáculos y más acosos
sin permiso nos pisan los talones.
Quizás dañemos mucho las entrañas
esperando la ayuda de un amigo,
que comiéndose a solas sus castañas
descompuesto me deja y sin abrigo.
Será que quien de cándido se ofrece
también sus propios pasos encarece.
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