SONETO CAUTIVO
Si yo por desconsuelos
me amargase la vida sin reparos,
quizás me pagaría vicios caros
para evitar que nunca me tiren de los pelos.
Quizás acostumbrado a mirar a los cielos,
hoy me duelan bastante los descaros,
al no admitir prodigios de los raros
teñidos con señuelos.
Pues de ninguna imagen fui devoto
al mirar con recelo ritos y procesiones
actuando a la limón con la política,
ya que a la libertad juntos ponían coto
al burlar sin pudor las ilusiones
sin admitir jamás ningún tipo de crítica.
|