SONETO
Que ningún sueño atroz me desoriente
y a rastras me conduzca por los suelos,
que si existir existen muchos cielos,
en ninguno me acojan de repente.
Pues con mis circunstancias coherente,
no busco que mis tristes desconsuelos
se conviertan en sádicos desvelos,
sin tener bajo cuerda un referente.
Porque sin merecer ningún castigo
convertida la vida en un calvario
sentido no le encuentro a la existencia,
cuando sólo mis cábalas persigo,
para sobrevivir lo necesario
en la más absoluta indiferencia
|