Soneto
Con mi viejo violn en bandolera
recorro los caminos de este mundo,
oyendo cnticos de amor profundo
que conmigo conservo en la chistera.
Y no conozco forma ni manera
de cantar un te quiero ms rotundo,
que an tomando menos de un segundo
quizs ninguna dama se ofendiera.
Tampoco existir mejor regalo
que escuchar una hermosa meloda
de noche y bajo el brillo de la luna,
donde ningn resentimiento malo
dispuesto a molestar se atrevera
a malograr nuestra mayor fortuna.
|