SONETO
A CALLAR
A callar nos ordenan los fiscales
en una democracia dicen plena,
ser que de intereses bien rellena
fuera de juego quedan los avales.
Si es que llegando a ser tal para cuales
cuando el poder de astucia se envenena,
sus decisiones dan empacho y pena
justo por someter a sus rivales.
Que si banales son sus argumentos
la justicia interpretan a su antojo
segn las encomiendas que reciban,
al quedar sin valor los fundamentos
que haber pudieran del azul al rojo
cuando contra pronstico se esquivan.
|