SONETO
LA LEY DEL MÁS FUERTE
Asistiendo a terapia fui consciente
que el perfil que me habían enseñado,
se movía en la mente dislocado
porque de toda lógica carente
chocando con un muro fui de frente
cuando no me apartaban para un lado,
si al cuestionar la ley del patriarcado
un tortazo me daban de repente.
Era la ley absurda que imperaba
con la que a todo el clan se sometía
sin escuchar escolio en contra alguno,
pues todo aquel que con poder mandaba
haciendo sin pudor lo que quería
sonando todo juicio inoportuno.
|