SONETO
CORAZÓN HERIDO
Para encauzar mi corazón herido
hube de subsanar mis cicatrices,
aunque sufrieron mucho mis narices
desde que abandonara solo, el nido.
Media vida pasé desprotegido
buscando sin reposo mis raíces,
hasta que saturado de varices
me di sin esperanza por vencido.
Hecho estaba al castigo y a la queja
que nunca reclamaba mis derechos
sabedor de que nada más había,
si dormir no quería tras la reja
donde morir morían los sin techos
sin que nadie asistiera mi agonía.
|