LO MUCHO QUE TE VENERO
Lo mucho que te venero merece una recompensa
porque si así y a propósito, tu cerebelo lo piensa
deberías entender la angustia de mi defensa.
Pues cantidad de desplantes, callándome habré sufrido
que en un eterno calvario, sumiso me has mantenido
y tanto que a duras penas, sobrevivir he podido.
Por eso yo considero que un detalle me merezco
cuando sin reparo alguno, todos mis dones te ofrezco
quizás porque de experiencia, en estas lides carezco.
|