SONETO ALEJANDRINO
POR LA LEY DE LA VIDA
Por la ley de la vida, atrás quedan los años
y a Dios pido que el último, por lo pronto no sea,
lo digo porque aún, rula bien mi azotea
y con agilidad compongo mis apaños.
También quiero pensar que mis ojos castaños
conformarse no pueden, si ya por la mar fea
comprobar comprobaron, que quien no se menea
muy ducho no será, entre propios y extraños.
Quizás pocas razones para ser optimistas
hoy viendo el panorama, a la vista tengamos,
cercados por catástrofes y conflictos violentos,
que sin ser muy agoreros, ni tampoco alarmistas
muy a regañadientes el terror soportamos
mientras a los que mandan, importa tres pimientos.
|