SONETO
VACÍO EXISTENCIAL
Alcanzar el vacío existencial
resulta básico en el día a día,
si acabar no se quiere enfermo y mal
como todo bufón de sacristía.
Pues fácil no lo tiene quien se fía
del sueño que en los símbolos se esconde,
si dejando entrever la fantasía
ante cualquier sospecha no responde.
Por eso huyo sin saber a dónde
cuando la vanagloria se me vende,
al prever que la fama el ego ronde
mientras al pie una trampa se me tiende.
Será que de mis juicios soy el dueño
y en alcanzar la gloria ya ni sueño.
|