Dicen madre tantas cosas,
que me da por afirmar.
Que no tan solo las rosas,
nos la regala el rosal.
Dicen madre que la vida,
es algo sensacional.
Aunque no solo la espina,
nos la regala el rosal.
Dicen madre tantas cosas,
que hasta me llegué a inspirar.
Pues yo conservo una rosa,
que no me la dio el rosal.
Y esa rosa primorosa,
eres tú ¡madre querida!
De todas, la más hermosa,
pues tú no tienes espinas.
Por eso en este día,
en que observo mi rosal.
Tan solo tú ¡madre mía!
mi rosa mejor serás.
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